Generalmente los siniestros ocasionados por fuego ocurren por fallas en las instalaciones en mal estado o la falta de mantenimiento, así como descuidos en las fuentes de combustión. Sin embargo los incendios son prevenibles, ¿cómo? fomentando una cultura del autocuidado.
Un incendio es un fuego fuera de control y puede iniciarse de manera instantánea o gradual. Ocasiona grandes daños a la economía de una región, a la productividad de las personas, a la salud, y al medio ambiente.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), se estimó que cada año mueren 265 mil personas por incendios. Más del 96% de las quemaduras por incendios ocurren en países de ingresos bajos y medios.
En este sentido, la Encuesta Nacional de Salud y Nutrición (ENSANUT, 2012) reportó que en México 124 mil personas sufren quemaduras no fatales al año, y por cada persona que fallece, 220 personas sobreviven, pero quedan con secuelas que afectan su imagen física (desfiguramiento por cicatrices), su funcionamiento corporal (discapacidades permanentes) y su conducta, ante la sociedad (a veces, estigmatización y rechazo).
Las quemaduras no fatales generan morbilidad, dado que una persona lesionada demanda atención médica de alta especialidad desde la fase más aguda hasta la rehabilitación de sus secuelas, generando un alto costo social e impactando negativamente las finanzas de los sistemas de salud.
Y aunque una gran cantidad de los incendios se pudieron prevenir, desgraciadamente se suele pensar “eso no me pasará a mí”. Pero no se está preparado para una situación de esta naturaleza, ya que cada año aumentan los siniestros 10% más.
Consiste en sensibilizar y concientizar a la población para qué se autocuide y tome medidas preventivas para mitigar y sobre todo evitar incendios en escuelas, centros de trabajo, viviendas y lugares de alta concentración (hospitales, centros de espectáculos, oficinas, etc,.) para reducir la pérdida de vidas, lesiones, impacto económico y ambiental, así como tragedias futuras.
La Campaña promueve tres eje de autocuidado y prevención.
Desde tu casa, colonia o trabajo.
¡Haz conciencia y participa! Por una cultura de prevención y protección civil, evitemos el sufrimiento futuro de las familias en México.